Los antiguos griegos fueron sus creadores basados en una cultura deportiva que permanece vigente y sólida en todo el mundo. Esa llama ya tocó suelo cuyabro y regresa después de 35 años, a través de los Juegos Nacionales y Paranacionales Eje Cafetero 2023, que se cumplirán a partir del 11 de noviembre. La capital del Departamento del Quindío albergará disciplinas como atletismo, BMX y bowling, entre otras.
A propósito de la llama deportiva o llama olímpica, se le reconoce como uno de los símbolos más importantes de cualquier evento del ciclo olímpico porque representa el encendido del espíritu deportivo. La primera vez en esta capital fue en 1988, cuando fuimos sede de Los XIII Juegos Deportivos Nacionales de Colombia, evento que se aperturó en el recién inaugurado Estadio Centenario. La segunda oportunidad tuvo lugar durante los XV Juegos Bolivarianos del 2005, que se disputaron tanto en el Quindío como en Risaralda.
¿De inicio milenario?
Para conocer los inicios, debemos remontarnos a los Juegos Olímpicos que se realizaban en la Grecia antigua. Esta tradición fue tomada a partir del mito del robo del fuego de Prometeo a los dioses para posteriormente entregárselo a la humanidad. Para estos primeros juegos, se adoptó como costumbre prender una llama frente a los templos para dar aviso a la población de que distintas competencias se estaban realizando en ese territorio.
Bajo ese mismo principio, los Juegos Olímpicos de Amsterdam en 1928, retomaron la tradición de la llama con el aval del comité olímpico, para anunciar a los ciudadanos el inicio de las competencias.
¿Qué representa la llama olímpica?
La llama tradicionalmente simboliza el encendido del espíritu deportivo y competitivo. En ese sentido, en el preámbulo de estos juegos, Armenia presentó su mejor cara para recibir el símbolo olímpico mediante un recorrido que duró 5 días y que atravesó las distintas calles, instituciones educativas y fundaciones de la capital. Además, el evento contó con múltiples muestras artísticas y culturales. La llama se volvió una oportunidad para cada lugar, cada ciudad y cada país. Es poder lucir lo mejor que poseemos como región y cultura, es promover las raíces y costumbres. La llama no distingue razas, nacionalidades ni religión y ese mensaje se transmite en los rincones que peregrina.
Desde la Revista Así Somos de Comfenalco Quindío extendemos la invitación a apoyar este tipo de eventos, que son de sano esparcimiento y distracción para niños, jóvenes y adultos. Los juegos Nacionales y Paranacionales se disputarán del 11 al 25 de noviembre y del 2 al 10 de diciembre. El acceso a los escenarios deportivos durante las competencias será gratuito.